Lo más probable es que a lo largo de tu vida, la palabra “arrendamiento” haya llegado a tus oídos, pero… ¿te has preguntado de qué se trata? ¿Cómo funciona? ¿Por qué te puede servir? ¿Debes utilizarlo?
Hay que señalar que, especialmente en el ámbito empresarial, el arrendamiento se ha convertido en una herramienta útil, pero que debe ser evaluada y ejecutada con los aliados correctos.
Por ello, te diremos claramente las razones que han hecho de esta práctica una de las mejores para los negocios de diferentes tamaños.
La forma más sencilla de explicarlo es con el ejemplo más general que existe: en la vivienda. El dueño cede un bien, por un tiempo determinado, a cambio de un pago, que suele ser dinero. Al final del periodo establecido, el arrendador vuelve a tomar posesión de dicho inmueble, mismo que el arrendatario debe regresar, según los acuerdos previos.
NO existe el acuerdo de arrendamiento gratuito, lo que significa que siempre debe haber un pago de por medio.
Sin embargo, en el ámbito empresarial el término se hace aún más complejo. Tanto bienes como servicios pueden ser arrendados, esto diversifica las opciones y aumenta los pormenores.
Algo importante es que en un acuerdo de este tipo, siempre existen obligaciones y beneficios, de arrendatarios y arrendadores.
Y como puedes notar, esta herramienta financiera tiene dos vertientes:
El arrendamiento, por lo general y por seguridad de sus participantes, se apoya en la firma de un contrato con todos los términos y condiciones estipulados en él.
De este modo, ambas partes se comprometen a cumplir con las obligaciones que les otorga dicho documento y se aseguran de recibir los beneficios pactados.
Algo común en el ámbito empresarial es que se busque el ahorro para poder hacer grandes inversiones. Sin embargo, algo que no suele contemplarse, es que desembolsar grandes cantidades de recursos puede poner en riesgo la integridad financiera de cualquier negocio.
Las razones de lo anterior giran en torno a dos situaciones que no se suelen tener en el radar:
Dicho lo anterior, podemos enumerar tres razones generales por las cuales vale la pena usar el arrendamiento:
Como parte de esta herramienta, podemos contemplar otras formas útiles de llegar a acuerdos a cambio de bienes, como el arrendamiento financiero que conlleva otros beneficios para los involucrados.
Esta vez se trata de la renta de un bien que involucra más derechos para el arrendatario:
Los puntos anteriores arrojan más beneficios para los arrendatarios:
Esta herramienta financiera puede ser la mejor aliada de una estrategia de negocios bien implementada. Si existe algún bien o servicio que pueda potenciar tu proyecto empresarial, sin duda es buena idea adquirir un contrato de esta índole.
Algo que puedes hacer para tener un panorama aún más claro, es acercarte a instituciones que ofrecen este tipo de servicios.
Una excelente opción es DexOne, una Sociedad Financiera de Objeto Múltiple especializada en el tema y en brindar apoyo a PyMEs mexicanas.
Este tipo de organismos, al tener un enfoque orientado a las empresas, ofrecen muchas ventajas, por encima de los bancos y sus financiamientos rígidos tradicionales.
Lo más probable es que a lo largo de tu vida, la palabra “arrendamiento” haya llegado a tus oídos, pero… ¿te has preguntado de qué se trata? ¿Cómo funciona? ¿Por qué te puede servir? ¿Debes utilizarlo?
Hay que señalar que, especialmente en el ámbito empresarial, el arrendamiento se ha convertido en una herramienta útil, pero que debe ser evaluada y ejecutada con los aliados correctos.
Por ello, te diremos claramente las razones que han hecho de esta práctica una de las mejores para los negocios de diferentes tamaños.
La forma más sencilla de explicarlo es con el ejemplo más general que existe: en la vivienda. El dueño cede un bien, por un tiempo determinado, a cambio de un pago, que suele ser dinero. Al final del periodo establecido, el arrendador vuelve a tomar posesión de dicho inmueble, mismo que el arrendatario debe regresar, según los acuerdos previos.
NO existe el acuerdo de arrendamiento gratuito, lo que significa que siempre debe haber un pago de por medio.
Sin embargo, en el ámbito empresarial el término se hace aún más complejo. Tanto bienes como servicios pueden ser arrendados, esto diversifica las opciones y aumenta los pormenores.
Algo importante es que en un acuerdo de este tipo, siempre existen obligaciones y beneficios, de arrendatarios y arrendadores.
Y como puedes notar, esta herramienta financiera tiene dos vertientes:
El arrendamiento, por lo general y por seguridad de sus participantes, se apoya en la firma de un contrato con todos los términos y condiciones estipulados en él.
De este modo, ambas partes se comprometen a cumplir con las obligaciones que les otorga dicho documento y se aseguran de recibir los beneficios pactados.
Algo común en el ámbito empresarial es que se busque el ahorro para poder hacer grandes inversiones. Sin embargo, algo que no suele contemplarse, es que desembolsar grandes cantidades de recursos puede poner en riesgo la integridad financiera de cualquier negocio.
Las razones de lo anterior giran en torno a dos situaciones que no se suelen tener en el radar:
Dicho lo anterior, podemos enumerar tres razones generales por las cuales vale la pena usar el arrendamiento:
Como parte de esta herramienta, podemos contemplar otras formas útiles de llegar a acuerdos a cambio de bienes, como el arrendamiento financiero que conlleva otros beneficios para los involucrados.
Esta vez se trata de la renta de un bien que involucra más derechos para el arrendatario:
Los puntos anteriores arrojan más beneficios para los arrendatarios:
Esta herramienta financiera puede ser la mejor aliada de una estrategia de negocios bien implementada. Si existe algún bien o servicio que pueda potenciar tu proyecto empresarial, sin duda es buena idea adquirir un contrato de esta índole.
Algo que puedes hacer para tener un panorama aún más claro, es acercarte a instituciones que ofrecen este tipo de servicios.
Una excelente opción es DexOne, una Sociedad Financiera de Objeto Múltiple especializada en el tema y en brindar apoyo a PyMEs mexicanas.
Este tipo de organismos, al tener un enfoque orientado a las empresas, ofrecen muchas ventajas, por encima de los bancos y sus financiamientos rígidos tradicionales.
